Después de pasar un par de días (1er. Día y 2º Día) en la bonita ciudad de Aveiro descubriendo sus rincones, nuestro último día completo lo dedicaremos hasta la hora de comer, a ver Costa Nova, Barra y el Faro de Aveiro, son imperdibles si vas a la ciudad portuguesa.

Desde nuestro hotel en el centro de Aveiro tenemos unos 20 minutos en coche hasta llegar a Costa Nova. (¡Los fines de semana suele haber bastante atasco, sobre todo a la vuelta!) Famosa por sus casas a rayas de colores, donde todo el mundo se quiere hacer fotos, pero ¡cuidado! que no se nos olvide no molestar a sus habitantes. En febrero (cuando fuimos nosotros) no hay problema de agobios con las fotos en las fachadas para los inquilinos.

¡ATENCIÓN! Recuerda ser siempre respetuoso cuando viajas. Lo que para tí es una foto de recuerdo, para otra persona será su hogar, su ciudad… ¿Te gustaría a tí?

Se puede dejar el coche en la Avenida José Estevao, frente a la ría de Aveiro, e ir en dirección a la playa, donde nos están las casitas que construyeron los pescadores para dejar sus aparejos de pesca.

Merece la pena llegar hasta la playa y tomarse un café en un chiringuito que hay antes de llegar a la playa.

Hay unas pasarelas de madera que comunican Costa Nova con la playa de Barra, entre dunas y el Océano Atlántico, son 6Km de paseo. En febrero no todos los chiringuitos están abiertos, pero que bien sienta una cerveza en ese lugar…

También se puede llegar al faro de Aveiro, allí llamado Farol da Barra. Es el faro más alto de Portugal. Nosotros cogimos el coche para luego irnos directos a la ciudad.

En esa zona hay muchos bares (más que en Costa Nova) donde comer un rico pescado. Nosotros elegimos uno de los pocos que estaban abiertos (no me acuerdo del nombre) y que tenía una terraza al sol.

Después de la rica comida, volvemos a Aveiro porque teníamos reservado un paseo en las famosas barcas de Aveiro, los llamados Moliceiros.

Por hacer la reserva del hotel con Busco un Chollo, teníamos un viaje en moliceiro por persona incluido. El precio puede rondar entre 10€ y 15€, merece la pena dar ese paseo tan típico y después de dos días en Aveiro ya toca ver los canales de otra forma.

Hay que ir al Jardím do Rossio, que es donde está el embarcadero. El paseo es muy agradable, pero en invierno hay que ir bien abrigado, los canales están muy al descubierto y sopla el aire del Atlántico. Nos cuentan la historia de los moliceiros y de los edificios que vamos viendo. Muchos de esos lugares ya los hemos descubierto a pie, lo que nos da otra perspectiva. Además vemos otros edificios que no nos ha dado tiempo a descubrir, como la fábrica de cerámica, hoy centro cultural. El barrio de pescadores, actualmente hay muchos restaurantes y tiendas de diseño.

SABÍAS QUE se llaman moliceiros porque transportaban un tipo de alga, moliço, que se utilizaba como abono, muy abundante en la zona.

Bien abrigados nos bajamos del moliceiro y nos vamos a cenar, repetimos en Zeca, el restaurante en el que cenamos la primera noche, porque nos gustó mucho.

Así termina nuestra escapada a Aveiro, segunda vez que la visitábamos. Siempre con pena de que termine este viaje de invierno, pero con la ilusión puesta en el año siguiente, (ya que siempre viajamos en la misma época, con los mismos amigos). Si quieres saber cuál fue ese destino aquí te lo dejo.😉😉

SI HAS LLEGADO HASTA AQUÍ ¡GRACIAS POR LEERME HASTA EL FINAL! SI TE HA GUSTADO 👍🏼✍🏼

Las fotografías y comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Aveiro. Febrero 2023.