Monkey Forest es un lugar imprescindible si estás en Ubud y si no tienes pánico a los monos.

Desde nuestro hotel (Rama Phala Ubud) está 5 minutos andando, aunque con lo que conlleva andar entre el tráfico de las calles de Ubud, tardamos un poco más. http://www.monkeyforestubud.com/

El Bosque de los Monos es una extensión de jungla en medio de la ciudad de Ubud, habitada por grupos de macacos balineses de pelo gris, cola larga y «despiadados».

La entrada cuestas 50.000Rupias balinesas, unos 3€por persona, y lo primero con lo que nos encontramos son unos carteles con las advertencias y condiciones de la visita:

  • No dar de comer a los macacos.
  • No mirarlos a los ojos.
  • No enseñarles los dientes.
  • No llevar objetos como gafas, móviles,… que llamen su atención.

Todo eso nos parecía un poco exagerado, pero os aseguro que no lo es.

Hay un corto recorrido desde las taquillas hasta donde empieza la jungla realmente, donde no nos encontramos ningún mono.

Así nos adentramos en el bonito entorno de Monkey Forest, Santuario sagrado del Bosque de los Monos.

Y a partir de ese momento íbamos más pendiente de por dónde podían aparecer los monos que del paisaje, la verdad.

 

¿No me digáis que no son monos?….

Los monos acaparan todas las miradas de los visitantes y de vigilantes, siempre preparados con tirachinas por si tienen salvar a algún turista de las «travesuras» de los macacos.

En el Bosque de los monos hay un complejo de templos y un cementerio. Pura Dalem Agung, es el templo de los muertos.

Las fotos son un gran reflejo de lo que vemos, hay pocas palabras que expliquen mejor lo que vemos.

Los vigilantes se encargan también de dar de comer a los monos y permitir por algunas rupias que los monos se posen en sus cabezas.

Cuando ya nos íbamos pasó lo inesperado, un macaco vio en mi bolso un pequeño monito y quiso apoderarse de él. ¡Menudo susto!

Todo se quedó en una anécdota que contar, aunque mi monito quedó destrozado, baboseado y en una papelera del Bosque de los Monos.

Una tarde de lo más divertida dan paso a un baño en nuestra bonita piscina en el hotel y muchas risas contando lo ocurrido en el Bosque y una cena un tanto europea con unos sandwich en un entorno muy balinés.

Las fotos y comentarios son de Imagina y Vive Tu Viaje en Monkey Forest, Ubud.               Bali, agosto de 2018.