Etiquetas

, , , ,

Diario de mi viaje: ¡qué ilusión me hace empezar este nuevo diario! sobre todo me ilusiona porque ha sido mi último viaje y lo tengo muy, pero que muy reciente, y me encanta escribir cuando tengo tan cerca los recuerdos. (También porque no sé cuando voy a volver a viajar…)

Información básica: Viajamos a Melilla, una de las dos Ciudades Autónomas que tiene España al norte de África en avión, una de las dos formas de llegar, también puedes llegar en barco desde Málaga, Almería o Motril.

Volamos pronto, el cielo nos regala un bonito amanecer y dos horas de vuelo después, llegamos a Melilla. Pequeño aeropuerto, que nos recibe gris y nublado. (Dan lluvia en toda España, una nueva borrasca nos acecha). Hay una pequeña Oficina de Turismo, una chica majísima nos pone al día de todo lo que hay que ver y hacer en Melilla. Nos dice que a la vuelta podemos coger del mostrador las postales que nos gusten de la ciudad, el que me conoce sabe que tengo una gran colección de postales. Desde luego que lo hicimos y también tomarnos una cervecita en su bar, llegamos con tiempo y a tiempo.

Coger un taxi es la mejor forma de llegar al hotel, sólo 3 km separan el aeropuerto del centro de la ciudad, como dato interesante, Melilla solo tiene 12 kilómetros cuadrados. El taxi nos cuesta 7,45€, merece la pena, somos 4 personas. No hay autobús para llegar y podemos ir andando, pero ya tendremos tiempo de andar durante los 4 días que tenemos en la ciudad.

Buscando hoteles, vimos que todavía no hay demasiada oferta hotelera, eso cambiará seguro, (tienen unas ganas enormes de abrirse al turismo). Nosotros elegimos el Hotel Melilla Puerto Affiliated by Meliá, está muy bien situado (justo al lado del «edificio raro» que todo el mundo conoce), también está muy cerca el puerto, la playa y el Paseo Marítimo.

Antes de entrar a hablar del hotel y de nuestro itinerario, os cuento que tienen un reclamo importante para visitar Melilla y es su «Bonos Melilla». Es un descuento del 75% en transporte y también en la estancia por persona. Es una buena opción que debéis contemplar si estáis pensando viajar a Melilla, la única condición es que saques el PAQUETE TURÍSTICO en una de las agencias de viaje colaboradoras. Nosotros hicimos la reserva del vuelo y del hotel directamente, en Iberia el vuelo con oferta de Black Friday, y en la web del hotel la reserva de las dos habitaciones, porque no conocíamos todavía el bono.

El hotel que elegimos fue el Hotel Melilla Puerto. Tiene un hall enorme y que deslumbra por su luz, es todo blanco y con todo lo que esperas de un hotel de 4 estrellas.

Casi todas las habitaciones del hotel tienen vistas al mar, la nuestra muy ladeada, se veía un poco el mar, pero es una habitación espaciosa y muy cómoda.

La Almoraima es el nombre de su restaurante, nuestra oferta incluía media pensión, así que teníamos las cenas incluidas. A elegir siempre entre varios primeros y segundos y un rico postre.

Cada noche estaba el restaurante lleno, bien por clientes del hotel como por melillenses, a cenar de cañas y tapas.

Estuvimos en Melilla cuatro días en el Puente que tenemos los profesores en febrero-marzo, está genial, porque siempre hay días entre semana y del fin de semana para ver la vida en diferentes momentos de las ciudades. Aunque mi diario de viaje siempre lo hago por días, (lo hago mientras estoy viajando), creo que es interesante tener en cuenta qué se debe ver en Melilla para aprovechar bien el tiempo:

  • Sus edificios modernistas.
  • Melilla la Vieja y si es posible hacer un Tour con Tu Guía en Melilla, ¡es genial! También es muy interesante verla por tu cuenta y entrar en los museos que no entras con el tour.
  • Subir hasta el Fuerte Victoria Grande y si es posible hacer la visita guiada, es gratuita.
  • Recorrer el Paseo Marítimo, al borde de sus playas, llegando a su también famosa valla, conocida precisamente por no cosas muy bonitas.
  • Por supuesto probar su riquísima gastronomía y su té a la menta.

En ese primer día después de volver a desayunar en el bar cafetería del hotel, nos vamos a conocer Melilla. Llegamos como primer punto para ver a la Plaza de España, con el Ayuntamiento a la cabeza y el Casino Militar, como segundo gran edificio de la plaza. Como buena ciudad turística que se precie, también tiene sus letras para tener una foto de recuerdo.

Poco a poco empiezan a aparecer los preciosos edificios modernistas de la ciudad. Había leído que es la segunda ciudad de España en importancia en su arquitectura modernista, detrás de Barcelona, pero no me imaginaba que fuera ser así, pensaba que podría ser un reclamo turístico un tanto exagerado, pero ni mucho menos, ¡es increíble!

Enrique Nieto y Nieto fue el artífice de todo esto. Nació (1880) y estudió la carrera de Arquitectura en Barcelona. Colaboró con Gaudí en la Casa Batlló y la Casa Milá. Llegó a Melilla en 1909 y vivió hasta su muerte en 1954. Realizó para el Ayuntamiento de Melilla muchas obras de estilo modernista y art déco.

Otros arquitectos también dejaron su huella en la ciudad, aunque de Nieto es del que más edificios hay. Hay edificios modernistas prácticamente en todo el centro de la ciudad, la Avenida de Juan Carlos I Rey es la arteria principal y tiene muchos edificios de los más bonitos, pero también están en otras muchas calles que vamos encontrando a lo largo del día.

Si tenéis mucho interés en la arquitectura modernista de Melilla, en la oficina de turismo o en internet, tienen bastante información sobre los edificios y las localizaciones, aunque yo voy a poner un «pero» que estoy segura que lo tendrán en cuenta y es que no hay apenas placas en los propios edificios con sus nombres, el arquitecto y algunas de sus características y creo que eso es un aspecto a mejorar. Yo no voy a poner el nombre de las casas, porque la realidad es que merece la pena dejarse llevar por el paseo modernista…

Melilla es un crisol de culturas, lo que se deja ver en la calle y también en alguno de sus edificios. Cuatro son las culturas que están presentes en la ciudad: cristiana, musulmana, judía e hindú. (las dos primeras son las más numerosas). Nos encontramos con una la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, de principios del siglo XX, justo enfrente de la Plaza Menéndez Pelayo.

Casi sin darnos cuenta nos vamos adentrando en la zona musulmana.

Nuestro viaje coincide con Carnaval y el inicio del Ramadán, las calles están adornadas para los dos eventos importantes del momento.

Llegamos a la Mezquita de Melilla, que también es del arquitecto Nieto, es de estilo Neoárabe de dos plantas. Nosotros no podemos pasar porque solo está permitido el acceso a personas de religión musulmana.

Toda esa zona está llena de comercios para musulmanes y parece que nos hemos trasladado a El Cairo o a Ammán (porque son las que conozco, pero imagino que se parecerá mucho más a Marruecos). Aunque se puede ver algún que otro edificio modernista, el contraste es precioso.

Nos metemos en el Mercado Central de Melilla.

Para llegar donde queremos tomar un aperitivo, desandamos el camino hecho, fijándonos en otros edificios, (cada vez que pasábamos por la misma calle, veíamos diferentes detalles).

El sitio en el que queríamos comer, también tomar el aperitivo (aunque en Melilla se come pronto, hay que tenerlo en cuenta), era La Cervecería para probar su riquísima tapa de pollo especiado (no hay foto, no dio tiempo🤣🤣). Su interior, por cierto no puede ser más bonito. Este sitio apuntarlo para comer😉😋

Sus pinchos morunos, ¡exquisitos!

En las calles están preparando todo para el desfile de Carnaval, que será justo al día siguiente. Seguimos contemplando edificios modernistas, pero empieza a llover y nos vamos de estampida al hotel, llueve muchísimo y no tenemos paraguas. Mañana será otro día…

SI HAS LLEGADO HASTA AQUÍ ¡GRACIAS POR LEERME HASTA EL FINAL! SI TE HA GUSTADO 👍🏼✍🏼

Las fotografías y los comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Melilla. Febrero-marzo 2025.