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Diario de mi viaje: el día amanece un poco triste para mi, pero llevadero. Tenemos todo el día por delante para seguir descubriendo Melilla.
Día 3: Fuerte de Victoria Grande. Museos de Melilla la Vieja. El Rincón de Casa Sadia. Parque Hernández.
Después del desayuno, toca hacerse fotos para reírnos un poco y nos vamos a la Plaza de España, para hacernos fotitos en las letras de Melilla. No podemos dejar de alucinar con los edificios modernistas, no he contado las fotos que tengo.
Queremos ir de nuevo a Melilla la Vieja, pero antes iremos al Fuerte de Victoria Grande, el monumento que está más alejado de todo, pero que se llega tranquilamente andando, disfrutando del paseo. Tenemos que subir por la calle de los «chalés caros» y descubrimos otra vista de Melilla la Vieja y de la Ensenada de los Galápagos. Podemos ver el balcón en el que estuvimos en la Casa del Reloj.
Seguimos subiendo por la carretera al Fuerte de Victoria Grande, pero no llegamos a la visita guiada de las 12 (hemos llegado 5 minutos tarde) y queda mucho hasta la siguiente, así que lo vemos por nuestra cuenta, fue una pena porque nos hubiera gustado mucho más. Por cierto la visita guiada es gratuita.


Este baluarte tenía como finalidad proteger Melilla, junto con otros dos más pequeños que no se conservan. En el interior hay unos cuadros explicativos de la Historia del fuerte, por lo tanto de la Historia de Melilla.
Lo vemos en menos de una hora y vamos bajando hacia la ciudad, descubrimos que hay unas escaleras por las que podemos atajar y llegar antes a la zona de los chalés.
Queremos volver a ver Melilla la Vieja, más detenidamente, entrar en alguno de los museos, llevar nuestro ritmo.
Volvemos a la Plaza de las Culturas para volver a introducirnos en ese túnel que parece que nos lleva a otra época y ahora conociendo un poco más la historia, nos fijamos en los detalles.





Entramos de nuevo en los Aljibes, no hay nadie y podemos leer tranquilamente los paneles que hay en las salas que son los decantadores.
Vamos al Museo de Historia, Arqueología y Etnología, ocupan los antiguos almacenes de las Peñuelas de abastecimiento de Melilla, construidos en 1781 bajo el reinado de Carlos III. Hoy en día después de su restauración, el interior se ha adaptado para ser museo. En sus salas está la Historia de Melilla desde la Prehistoria hasta la actualidad, espacios también para las diferentes culturas que han habitado y habitan Melilla.
La entrada es gratis y llegamos justo para la visita guiada, merece muchísimo la pena, la guía, otra enamorada de la ciudad, ¡maravilloso! Estamos dentro un poco más de una hora.
Melilla también llamada por los fenicios Rusaddir, tiene mucho que descubrir y por la hora vuelve a tocar descubrir su gastronomía. Vamos a un bar que nos recomienda Jennifer (nuestra guía en la visita guiada: Tu Guía en Melilla), Bar Sevilla. Un bar auténtico, muy conocido por los melillenses y ahora también por los forasteros.
Perfecto para abrir boca, nos hubiéramos quedado a comer tapeando sin ninguna duda, pero habíamos reservado en uno de los restaurantes más famosos de toda Melilla, El Rincón de Casa Sadia. Este restaurante está muy cerca de la sinagoga, que tampoco pudimos ver por no llegar a la visita.
Casa Sadia un restaurante muy demandado por turistas y melillenses y cierra pronto, así que es importante reservar. A nosotros nos tocó comer en una mesa alta, pero bastante bien.
Aperitivo nada más llegar, eso ya pinta bien, unas berenjenas fritas con miel de caña y sus famosos pinchitos (riquísimos). De plato principal uno pidió calamares a la plancha, (yo llevaba pensando desde que llegué a Melilla comer cuscus) por supuesto pedimos cuscus de pollo y tallin de cordero y un rico postre para compartir.
Un té moruno en otro sitio para alargar la sobremesa y compartir momentos, eso también es viajar. La buena conversación nos lleva a dar un paseo por uno de los parques más importantes de la ciudad, el Parque Hernández.
El Parque Hernández ubicado en pleno corazón de Melilla, es un oasis urbano que combina historia, arquitectura modernista y exuberante vegetación. Inaugurado en 1902 gracias a la visión del general Venancio Hernández Fernández, este espacio surgió sobre el antiguo cauce del Río de Oro como un lugar de esparcimiento para la creciente población melillense.
Lo que hace especial este parque, es que alberga más de 200 palmeras de distintas especies, ficus centenarios, araucarias y un impresionante ejemplar de drago. Su diseño recuerda a los jardines del Generalife, con paseos flanqueados por palmeras y fuentes ornamentales. Tiene un templete de música, pérgolas, esculturas de personajes ilustres y fuentes cibernéticas que se iluminan por la noche.
En 2007, fue reconocido como Parque Histórico por la UNESCO, consolidando su valor patrimonial y cultural. Es perfecto para pasear, relajarse o simplemente disfrutar del entorno, el Parque Hernández es una parada obligatoria para cualquier viajero que quiera conocer el alma verde de la ciudad.
Al recorrer el parque salimos por la puerta contraria a la de la Plaza de España, para seguir nuestro paseo por otra parte de la ciudad y ver otros edificios. Entre ellos la plaza de toros de Melilla, también llamada «la Mezquita del Toreo», es la única en activo del continente africano. Fue inaugurada en 1947 de estilo neobarroco andaluz, de planta circular, con capacidad para más de 8.000 espectadores.


Fue construida sobre una antigua necrópolis romana. Acoge corridas de toros, eventos culturales y se han realizado visitas guiadas. Declarada Bien de Interés Cultural, la plaza es un símbolo de la tauromaquia melillense y un testimonio arquitectónico de la ciudad.
Jugando como niños con las luces de una plaza cercana a nuestro hotel termina otro día en Melilla, nuestro último día completo. Nos queda la mañana del día siguiente, la pasamos viendo aquellos edificios modernistas que más nos habían gustado, tomando un café y haciendo alguna que otra compra. Así termina un viaje a una ciudad que sorprende y que desde luego invito a que visites y que la disfrutes en cualquier época del año😍.
¡GRACIAS POR LLEGAR HASTA EL FINAL! SI TE HA GUSTADO, HÁZMELO SABER👍✍️. ME HARÍA MUCHA ILUSIÓN LEERTE Y SEGUIR COMPARTIENDO VIAJES.🫶🗺️
Las fotografías y los comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Melilla. Febrero-marzo 2025.














































































