Nuestro segundo día en Aveiro amanece con un poco de lluvía y un rico desayuno en nuestro hotel, pero nada que no solucione un paraguas y las ganas de seguir viendo la ciudad.

En Aveiro se puede llegar a todos los sitios andando, por eso nos metemos en su centro histórico y comenzamos la visita en su Catedral, Sé en portugués. También se la conoce como la iglesia de Santo Domingo. Os recuerdo que hay una entrada única a los museos de Aveiro que cuesta 7€ que merece la pena y que os cuento en nuestro primer día en Aveiro.

Hubo una primitiva iglesia en el siglo XV que formaba parte de un convento dominico. Durante los siglos XVI y XVII se realizaron ampliaciones, cambios. Se conserva la portada barroca con columnas salomónicas. En 1938 pasó a ser la catedral.

En el atrio está su famoso Cruzeiro de S Domingos, de estílo gótico del siglo XV donde los brazos llegan a una flor de lis. El capitel está formado por imágenes que representan la pasión de Cristo.

Las capillas de su interior hay varias piezas de gran valor, además bonitos azulejos azules, que no se nos olvide que estamos en el país de los azulejos.

Retablo del siglo XVI representando a la Virgen y a su prima Isabel, en la capilla de la Visitación (foto 1). En la capilla de Nuestra Señora del Rosario hay una imagen de finales del siglo XVI de la patrona de Aveiro (foto 2). Imagen de la Virgen con el niño hecha de alabastro (foto 3). Órgano barroco del siglo XVIII.

Ha dejado de llover pero el día se ha quedado muy gris. La siguiente visita está al lado de la Sé, es el Museo de Aveiro Santa Joana. Uno de los museos y lugares más importantes de la ciudad.

Ocupa el antiguo convento de Jesús del siglo XV. A él se retiró la hija del rey Alfonso V, la infanta Joana. El museo se creó a principios del siglo XX para guardar muchas piezas de orden religioso. En la parte baja del edificio está el bonito claustro de finales del siglo XV – principios del siglo XVI.

El coro bajo donde podemos ver el precioso sepulcro de Joana que es de mármol de diferentes colores.

El refectorio y sala capitular.

La iglesia de Jesús es lo más llamativo del antiguo convento, ya que está al más puro estilo barroco.

En el coro alto está el famoso Cristo crucificado. La imagen es famosa por lo raro de su exprexión, me explico, depende del lugar donde te pongas para ver la cara del Cristo verás su sonrisa con los ojos entrecerrados y si lo miras por el otro, la cara se ve triste y con los ojos cerrados. La talla está hecha a tamaño natural de madera.

Salimos muy «embarrocados» (palabra que no existe, pero que yo utilizo cuando veo algo que es muy muy muy barroco. Continuamos nuestro paseo y seguimos comprobando que estamos en el país de los azulejos cuando nos encontramos edificios que mezclan materiales y tienen los azulejos como protagonistas.

Llega el momento de comer, en Portugal se come pronto, habíamos localizado un restaurante que nos gustó para comer: Tasca do Sal. Estabamos sólos en el local y disfrutamos de unas ricas tapas, un vino blanco estupendo y un buen pescado. Con detalles que enamoran en la decoración (para mi siempre es un punto más, aunque no sea lo más importante).

Entre ratos de lluvia y paraguas, seguimos paseando por la ciudad descubriendo sus bonitos edificios.

En Aveiro hay un centro comercial moderno al aire libre Forum por el que poder dar un paseo viendo alguna que otra tienda. No es imprescindible pero parece que resguarda un poco del mal tiempo.😉

Así termina un segundo día en Aveiro donde descubrimos su catedral, su museo más importante, pero sobre todo, sus calles y edificios. Aún nos queda un día más para conocer Costa Nova y darnos un paseo en Moliceiro, será nuestro tercer día completo en Aveiro.

SI HAS LLEGADO HASTA AQUÍ ¡GRACIAS POR LEERME HASTA EL FINAL! SI TE HA GUSTADO 👍🏼✍🏼

Las fotografías y comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Aveiro. Febrero 2023.