Bali para mi significa, sonrisas, colores, flores, sabores, sensaciones y olores.
Uno de los olores mas agradables que recuerdo de nuestro viaje es el olor al café de luwak. Un pequeño mamífero de aspecto entre un mono y un roedor, que come granos de café…
La siguiente visita que os cuento es la que hicimos a una especie de granja, donde además de cultivar plantas medicinales, colmenas con abejas, cacao, infusiones,… Su producto estrella es el café de luwak.
Para nuestra visita a la granja nos acompaña Pande, nuestro guía y una joven balinesa, que nos va explicando y enseñando todo, aunque para nosotros más que granja, nos parece una selva.
El luwak en un ambiente de lo mas apacible y relajado, (aunque los tienen en jaulas) come granos de café, a las 16 horas (así nos lo cuentan) lo expulsan, imagina…
Recogen los excrementos y dejan que se sequen al sol, una vez seco, «lavan bien todo» con agua caliente, para quedarse con el grano de café. Vuelven a dejarlo secar y una mujer mas mayor tuesta los granos en una especie de wok enorme. Otra mujer lo muele de una manera tradicional y manual. Así se convierte en el café mas caro del mundo. Ya está listo para su consumo, Los turistas pueden comprarlo después en grano o ya molido.
Después seguimos un estrecho camino entre granos de cacao, café, especias, en esa pequeña selva…
Hasta llegar a un pequeño salón, en la selva, donde íbamos a realizar una cata de distintos tipos de te, y café que hacían en la granja. Si queríamos probar el de luwak teníamos que pagar unos 2€ por café, solo sin leche. Pero tengo que decir que después de llevar ya varios días en Bali, ese era el mejor café que probábamos.
Después seguimos nuestro paseo por otro camino estrecho hasta llegar a la tienda de la granja.
En la tienda tenían todos los tipos de te y de café que habíamos probado por si queríamos comprar y claro está que caímos en la tentación, pero ¡cómo no hacerlo!
Cada paquete al cambio de rupias a euros, costaba unos 42€, un buen regalo que hacer de la isla.
Nos despedimos de nuestra amable y risueña guía, porque nos reímos con ella y ella se río con nosotros, todo lo que decíamos la producía carcajadas, así que la visita fue de lo más divertida.
A la vuelta del viaje, ya en Madrid vimos que el café de luwak, se podía comprar en tiendas goumert y el paquete más barato que encontramos fue el de 100 gr. y costaba unos 70€. ¡Nos salió barato, encima!
Las fotografías y los comentarios son de Imagina y Vive Tu Viaje en Bali, agosto 2018.