Para mi no hay nada mejor que pensar que voy a ir a Asturias, se me olvida todo, solo pienso en lo que voy a hacer allí, o solo pienso en su olor, su color y ya lo demás me da igual.
Es mi «rincón secreto» como dice Rulo y esta imagen del Naranjo de Bulnes lo expresa todo.
Tanto es así que este pasado Puente de Mayo (en Madrid fueron 4 días 29, 30, 1 y 2), quisimos dar una sorpresa a nuestro hijo pequeño, Asturias también le vuelve loco, pero no reservamos nada, ya que siempre vamos a un hotel pequeñito de 2 estrellas en Arenas de Cabrales, Hotel Arenas de Cabrales. http://www.hotelarenasdecabrales.com/
Cuando llamamos para hablar con Begoña, así se llama su dueña y ya gran amiga de la familia, no tenía hueco en su hotel, pero ¡no pasa nada!, «para esta familia de madrileños siempre hay un hueco».
Sin saber donde íbamos a dormir nos presentamos el sábado por la tarde en Arenas, después de pasar un día tranquilamente en Ribadesella.
Efectivamente, teníamos sitio, nos había guardado una casita en el pueblecito de al lado, (no llega a 2km dirección Arenas de Cabrales – Cangas de Onís AS-114) Poo de Cabrales y así conocimos la casa que ya nos había nombrado Begoña muchas veces, nuestra casita de Poo.
La casa ideal para los 4, incluso caben 2 personas más, ya que además de dos habitaciones con cama de matrimonio, tiene una pequeñita habitación con dos literas. Eso si, los niños tuvieron que dormir en la misma cama, pero no hay problema, la cama es grande.
Cuando entras lo primero que vemos es la cocina y el salón comedor, tele, armario con juegos, y un espacio para la caldera. Uno de los inconvenientes de la casa es que no tiene sillón…
A la derecha suben las escaleras para la primera planta, donde está un baño con ducha, la pequeña habitación con las literas (no utilizamos) una habitación con cama de matrimonio, donde los niños se quedarían.
Hay otro pequeño tramo de escaleras que sube a la segunda planta donde está nuestra habitación, grande, abuhardillada, con un armario enorme y un baño con bañera.
Podríamos ver desde nuestra ventana el Naranjo de Bulnes si no estuvieran los árboles de la izquierda.
Para ver una preciosa vista del Naranjo, al lado de Poo hay un mirador. Como a 1km de la casa.
¡¡¡¡Se puede ser más bonito!!! Podría poner 1000 fotos y para mi ser todas distintas y maravillosas.
Como veis la casa está genial, aunque encontramos algún inconveniente, además de lo del sofá. La casa está mu pegada a la carretera AS-114 por lo de dejar el coche cerca no es fácil, suele haber mucho sitio cruzando la carretera al lado de un parque, del que sale un camino muy agradable entre árboles que tienes que pasar para volver a cruzar hacia la casa. Justo enfrente del camino se puede ver la bonita iglesia de Poo.
Pero para nosotros el mayor inconveniente es no estar en Arenas de Cabrales, el coger el coche para ir a cenar después de una ruta, en cualquiera de sus bares, especialmente en Calluenga, (nuestro preferido). Es cierto que se puede ir andando por un sendero, pero por la noche da mucha pereza. Pero el verdadero inconveniente es no estar en el Hotel, con Begoña, compartiendo esos estupendos momentos con ella, esas charlas trascendentales, esas ganas de hacer la ruta que nos cuenta, esa música tan especial que nos pone en el desayuno….
Hemos prometido, por lo menos lo intentaremos, ir una vez al año. Del Señor S. se fía…..
La casa de Poo es ideal si lo que quieres es ser muy independiente y no compartir con otras personas el momento del desayuno, un patio común, un aparcamiento,o si simplenente sois una pequeña familia numerosa… En fin todo tiene sus ventajas e inconvenientes.