Diario de mi viaje: Me parece mentira volver a salir de viaje de verdad, de vacaciones después del año tan intenso que he tenido. ¡¡Tengo unas ganas!! Ahora, lo de hacer la maleta, cada vez lo llevo peor y procrastino hasta el último ultimísimo momento.
Tenemos más de 6 horas, (contando paradas) hasta llegar a nuestro primer destino A Coruña y el Hotel Riazor, donde nos alojaremos las tres primeras noches.
El Hotel Riazor se encuentra en pleno corazón de A Coruña, frente a la emblemática playa de Riazor. El hotel de cuatro estrellas, combina un diseño moderno con el encanto atlántico. Completamente renovado, sus habitaciones sencillas y muy cómodas, muchas con vistas a la playa (la nuestra no, últimamente no tenemos suerte con las vistas😭). Esta vez cogimos alojamiento y desayuno, un estupendo bufé, lo que no probamos, fue su restaurante). La ubicación del hotel es privilegiada, literalmente a un semáforo de la playa, lo convierte en un punto de partida perfecto para explorar la ciudad a pie.
El hotel cuenta con un acuerdo especial con el aparcamiento público Riazor-Orzán, lo que permite tener tarifas preferentes y muy cómodo al estar muy cerca. Facilita el acceso sin complicaciones al resto de zonas de A Coruña, ya que es una península y tiene problemas de atascos, pudiendo ir a pie o en autobús a todos los lugares que tenemos previstos ver. La tarifa para alojados en el hotel es de 15€ por día.
Nuestra primera experiencia con la gastronomía gallega (en este año) fue en un bar que nos habían recomendado por casualidad y resulta que está al lado del hotel, El Kavras en la Plaza Cormelana, nos estrenamos con un rico raxo de cerdo y un choricito muy rico (todo viene con paratas, que están también buenísimas).
Decidimos en esa primera tarde caminar por el Paseo Marítimo hasta llegar al Domus (el cielo está muy muy gris y parece que va a llover) y así nos refugiamos de la lluvia viendo un museo interactivo y muy interesante.
La entrada al Domus, Museo del Hombre, es gratis para los profesores, la entrada general 2,06€, para estudiantes 1,03€. (No hemos llegado a descubrir porque tienen esos decimales en los precios a los museos y lugares que se visitan). En el museo estamos más de 1hora, si vas con niños es un plan perfecto para una tarde o una mañana lluviosa, por cierto la vista desde su mirador en la parte de abajo es muy bonita de toda las playas, del Paseo Marítimo y de ese perfil costero de la ciudad que la hace tan bonita.
Desde el Domus hacemos un recorrido por la ciudad y por la otra parte del Paseo (como es una península, el Paseo da toda la vuelta) hasta llegar al Castillo de San Antón, sede del Museo Arqueológico de A Coruña y que no tuvimos la suerte de poder ver (los domingos solo abren hasta las 15 horas), pero creo que es una visita que merece la pena. Te dejo aquí su web para que compruebes bien los horarios y los precios (sábados entrada gratuita).
Nos vamos directos al famoso Paseo de La Marina, el de las casas con balcones acristaladas, ese, que lo recordaba igual que en mi primer viaje a Coruña hace 40 años… Salvo por una cosa, y es que, han reducido en número de carriles por el que pueden circular los coches, ahora tiene más parte peatonal. ¡Qué bonito es! Se ha quitado el gris y el blanco de los cristales creo que reluce un poco más.
Vemos una cola enorme en una heladería por lo que deducimos que tiene cierta fama en la ciudad Helados La Ibi, pero como es nuestro primer día de viaje y estamos de vacaciones, no tenemos ninguna prisa y esperamos (luego no mucho, la verdad). ¡Qué rico está mi helado de limón! Nos sentamos a comerlo como todos los coruñeses en un banco corrido frente al puerto.
Cerveza en una buena copa, un buen pincho y hoy nos vamos pronto a descansar que mañana hay que madrugar🎶🎵, no sin antes ver la vista desde la terraza – solárium del Hotel.
A continuación comparto el itinerario que seguimos durante nuestra estancia en A Coruña y La Costa da Morte. Como bien sabes, elegir qué ver o hacer en un viaje no siempre es tarea fácil. En este caso, he recogido lo que realmente hicimos —como siempre, recuerda que este blog es un diario de viaje—. Aunque llevábamos muchas ideas y planes previstos, el ritmo y las decisiones fueron surgiendo sobre la marcha, según lo iba pidiendo el momento. (Pronto estarán completos todos los enlaces)
Diario de mi viaje: nuestro viaje 25 aniversario después de unos días increíbles en la Ribeira Sacra, continua en la comarca leonesa del Bierzo, con dos objetivos claros: el primero, conocer las Médulas y el segundo, alojarnos en Prada a Tope.
Día 4: Parada de Sil. Pasarelas del Río Mao. Hotel Palacio de Canedo. Prada A Tope.
Después de descubrir el bonito lugar de las Pasarelas del Río Mao, todavía en la Ribeira Sacra, nos vamos directos a Prada a Tope. Al llegar hacemos una entrada a lo Falcon Crest, desde el coche con viñedos a los lados y al frente, la casa.
El hotel de Prada a Tope se llama Palacio de Canedo, enclavado entre viñedos en el corazón de El Bierzo (León), en el pueblo de Cacabelos, muy cerca de Las Médulas. Es mucho más que un hotel: es una experiencia sensorial que combina historia, gastronomía y naturaleza. Este edificio del siglo XVIII, restaurado por el carismático José Luis Prada, ha sido transformado en una posada rural con encanto, restaurante, bodega ecológica y tienda gourmet.
Llevábamos mucho tiempo queriendo venir aquí y por fin, lo hemos conseguido y no defraudó. El hotel tiene 14 habitaciones con decoración personalizada y vistas al viñedo, cada una con su propia historia. Nuestra habitación, Los Castaños con regalito incluido de la casa.
Todos los rincones están muy cuidados hasta el último detalle. Te encuentras en las puertas, en el ascensor y en otros rincones frases muy motivadoras, de las que hacen pensar en positivo.
Después de dejar las cosas en nuestra preciosa habitación, fuimos a dar un paseo por sus viñedos (hay una senda marcada) con más de 30 hectáreas de viñedos ecológicos.
CURIOSIDAD: ¿Sabes por qué ponen rosales al inicio de los viñedos? Aunque parece que están ahí para decorar, los rosales cumplen una misión muy importante, se les llama «centinelas naturales» porque son más sensibles que las vides a algunas enfermedades, sobre todo a los hongos. Los rosales muestran los primeros síntomas de enfermedad antes que las vides, esto permite actuar rápido y prevenir que se extienda. Gracias a ellos, se reduce el uso de productos químicos y cuidar el viñedo de una forma más ecológica.
Es imprescindible visitar la Bodega histórica y realizar una visita guiada que incluyen catas y paseos entre cepas, en su original Carroviñas. Nosotros la reservamos directamente en el hotel y había pocos huecos, está muy solicitada y la verdad, es que merece la pena.
Cogimos la Visita nº 3 PREMIUM, que incluye: recorrido por las instalaciones del vino, cava, sus famosas conservas, el paseo en el Carroviñas con la persona que hace la visita guiada y una cata de selección de Prada, maridado con quesos y embutidos, por supuesto de El Bierzo. 40€ por persona.
He olvidado decirte que su frase estrella es ¡A Tope! Se repite todo el tiempo y por todo el mundo, nosotros lo vivimos ¡A Tope también!👍No te puedes perder su pequeño museo con grandes cosas relacionadas con el hotel, pero sobre todo con su dueño Prada, José Luis Prada Menéndez. Una persona muy influyente en la comarca, el mejor embajador que El Bierzo puede tener. Su historia y su vida muy interesante.
Cuenta con un Restaurante Prada a Tope, donde se sirven platos tradicionales como el botillo y pimientos asados, maridados con vinos propios. Por supuesto que nosotros probamos en varias ocasiones durante nuestra estancia, además el desayuno era en el mismo salón, bueno en un precioso balcón con vistas a los viñedos. El Palacio también tiene una terraza donde poder picar algo menos elaborado (que también probamos). Para mi las joyas del restaurante son los pimientos asados y sus cerezas en aguardiente. (Estos productos los tienen en todos sus restaurantes, también en el de Madrid, de la calle Príncipe, al que nosotros hemos ido mucho).
En una comida en el hotel, coincidimos con Prada y su mujer Flor, terminamos hablando con ellos en una sobremesa muy de las buenas, de las que compartes el momento.
La Tienda gourmet con conservas artesanales, vinos, licores y productos del Bierzo elaborados en el propio palacio, es de otro nivel, tienes ganas de llevártelo todo.
Declarado Bien de Interés Cultural, el Palacio de Canedo es el lugar ideal para desconectar, saborear lo auténtico y dejarse envolver por la magia de la tradición berciana. Creo que nosotros deberíamos celebrar cada aniversario de boda en este lugar tan maravilloso y con tanta buena gente (de momento no hemos vuelto, ojalá escribir en el blog nos haga volver).
Cada viaje nos transforma, y este lo ha hecho con estilo, sabor y alma. Si estás pensando visitar El Bierzo, no lo dudes: déjate envolver par la magia del Palacio de Canedo. Te aseguro que saldrás con el corazón más lleno de lo que llegaste. Saldrás ¡A Tope!
¡GRACIAS POR LLEGAR HASTA EL FINAL! SI TE HA GUSTADO, HÁZMELO SABER👍✍️. ME HARÍA MUCHA ILUSIÓN LEERTE Y SEGUIR COMPARTIENDO VIAJES.🫶🗺️
Las fotografías y los comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Prada A Tope, El Bierzo. Julio 2022.
Peñafiel, es uno de esos lugares que puedes repetir cada vez que vas a visitar una bodega de Ribera de Duero. Es agradable pasear por sus calles, aunque yo sigo pensando que uno de los lugares más bonitos es su famosa Plaza del Coso.
Siempre que voy está desierta, con las ventanas de las casas cerradas y cada vez más carteles de Se Vende.
El Castillo de Peñafiel es el otro lugar precioso, aunque en esta ocasión no lo visitamos, llevabamos el fin de semana organizado y con poco tiempo.
El alojamiento que reservamos fue Pesquera AF Hotel. Se encuentra a los pies del Castillo. Está construído en una antigua harinera de 1922, rodeado de muchas bodegas. (Pesquera tiene su propio vino también).
Es un hotel boutique con menos de 40 habitaciones y con todas las comodidades de un edificio moderno. Un spa para los clientes con un circuito de hidroterapia que no utilizamos (otra vez será).
Nuestra habitación, una bonita suite que ¡me encanta! En esta ocasión llevamos incluido el desayuno.
El hotel cuenta también con un restaurante ORIGEN-ES, al que nosotros tampoco fuimos, porque más abajo cuento donde teníamos reservada la comida del sábado.
Donde sí que cenamos las dos noches de nuestra estancia fue en su taberna La Perla, también abierta para las personas del pueblo. Vino de la zona por supuesto y unas ricas raciones para cuatro, ¡cenas estupendas!
El plato fuerte del fin de semana fue sin duda la visita a la bodega Cepa 21, para realizar su experiencia Raíces. 35€ por persona visita a la bodega, imposible empezar la visita en los viñedos porque llovía y cata de tres de sus vinos más famosos.
Cepa 21 es una bodega actual donde José Moro ha creado su propio mundo del vino. Un par de semanas antes Cepa 21 salió en todos los informativos y prensa del mundo porque alguien abrió los grifos de varios de sus depositos, litros y litros desperdigados por la bodega lo que implica una gran perdida económica y una perdida enerme para la siguiente producción de vino.
La sala donde nos reciben para la visita ¡preciosa! con unos grandes ventanales para ver los viñedos.
En el año 2000 plantó 50 hectáreas con cepas iguales que las de su abuelo y su padre. En 2002 se produce la primera añada del vino de Cepa 21. En 2007 se inaugura el edificio donde está la bodega (Hasta ese momento se hacía en la bodega Emilio Moro), también se produce por primera vez Hito, el vino más joven de la marca. En 2009 se produce la primera añada de Malabrigo. Así hasta la actualidad surgen el resto de sus vinos.
La bodega es moderna, con la tecnología más innovadora del momento, la arquitectura es de lo más vanguardista.
En el principio de la visita hay mucho ruído, donde están todas las botellas con las nuevas etiquetas de los diferentes vinos. (Personas que no están en la visita hacen mucho ruído… ) hasta que vamos a la zona de depositos y de barricas.
Unos 40 minutos más o menos y nos vamos a «la cata», que consiste en probar los tres vinos más íconicos de Cepa 21:
Hito, tinto joven.
Cepa 21, tinto más emblemático de la marca.
Malabrigo, vino estrella de la bodega.
Terminada la visita y cata, tenemos reserva allí también en el restaurante Cepa 21. En la misma línea de la bodega, vanguardista con grandes ventanales. Dirigido por el chef Alberto Soto. Menú Cepa 21 para cuatro. El menú tiene 11 pases, el vino aparte.
Al principio teníamos dudas de si nos gustaría, de si comeríamos bien y desde luego que sí. Todo estaba buenísimo, las cantidades como muestran las fotos eran pequeñas, pero después de los 11 pases imposible tener hambre. Buen vino, la mejor compañía, una gran elección la de reservar en Cepa 21, ya sólo le falta el hotel para quedarse a dormir…
Al hablar con los camareros nos invitaron a entrar en la cocina para conocer al 2º chef y al repostero jefe, pudimos felicitarles por el estupendo menú y servicio.
Ha dejado de nevar, pero no de llover y tenemos que volver a Peñafiel, un poco de descanso en el hotel no viene mal.
Dan muy mal tiempo para el domingo, decidimos desayunar tranquilamente en el hotel (desayuno bufett estupendo) y volver a Madrid para evitar un atascazo por una nevada.
No podíamos irnos de Peñafiel sin visitar la tienda, por lo menos, de Pago de Carraovejas para comprar algo de vino. (Para nosotros nuestro vino… Queda pendiente la visita y comida en esta bodega…
Así termina un fin de semana de regalo de cumpleaños, el primero de muchos, estoy segura.
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Las fotografías y comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Peñafiel y Bodega Cepa 21. Marzo 2024.
Para empezar a contaros nuestro increíble, fascinante y maravilloso viaje a Jordania, he decidido que voy a empezar por los hoteles en los que estuvimos durante toda la estancia. En esos alojamientos teníamos incluido el desayuno. Como veréis hay un poco de todo. Volveríamos a repetir en cada uno de ellos, (bueno quizá en el del desierto tendríamos que haber cogido la habitación «esfera» y no la estandar, pero os lo cuento más abajo).
El listado de hoteles está en orden según nuestro itinerario realizado durante 12 días:
Amman: Amman West Hotel 4*.
Reserva Natural de Dana: Dana Guest House 3*.
Feynan: Feynan Ecolodge.
Petra: Petra Moon Hotel 4*.
Wadi Rum: Hasan Zawaideh Camp.
Mar Muerto: Dead Sea Spa Hotel 4*.
Amman West Hotel 4*. Amman.
Amman West Hotel, situado en el Cuarto Círculo. En una zona de embajadas, de hecho está muy cerca de la Embajada de España. A unos 4Km del centro. Pasaríamos las 3 primeras noches.
Amman está organizada en ocho círculos o circunvalaciones que parten del centro hacia la periferia. Todo el centro comercial y más turístico, como imagináis está en el Primer circulo, así que nosotros para ir al centro siempre íbamos en Uber, por eso de no controlar demasiado bien las distancias y el tráfico (Aunque Amman no es tan caótica como El Cairo). Nos costaba al rededor de los 2€ los tres. Íbamos a las calles más importantes y conocidas como Gardens Street o Rainbow St.
Es un hotel muy familiar y cómodo, tiene una piscina en su planta baja con agua caliente, caliente, nada refrescante para combatir el calor, pero al menos nos podemos bañar (creo que sudas más después del baño que antes).
En la habitación hay aire acondicionado, tele (poco la vimos, no hay canales internacionales, tampoco es necesario). Vistas a la enorme ciudad de Amman. Una entrada muy espaciosa con sillón, sofá, mesa con sillas, hervidor de agua con infusiones, nevera que llenamos de botellas de agua, una cama de matrimonio y una cama supletoria para Pablo. La habitación muy espaciosa, (importante para dejar maletas).
No tengo fotos, dejo algunos vídeos para que veáis la habitación y alguna de las instalaciones.
Dana Guest House 3*. Reserva Natural de Dana.
Llegamos al Dana Guest House en la Reserva Natural de Dana de la mano de nuestro guia jordano Ameen. Pasaríamos 1 noche en este hotel – pensión – albergue.
Tengo que decir que lo maravilloso de este hotel es su ubicación en un alto con vistas a la Reserva Natural. Es un lugar ideal para familias y personas que quieren hacer senderismo, muchas rutas parten de aquí para conocer la zona. Es más, no es posible adentrarse en la Reserva si no vas con guía. El camino hacia Feynan es uno de los más famosos y es el que haríamos nosotros. Tenemos la tarde y noche para descansar y prepararnos para la ruta.
El hotel tiene Wi-fi en las zonas comunes, una terraza con vistas a la Reserva, tienda de productos locales e información sobre la Reserva Natural. Aquí teníamos incluida la cena en el comedor, comida muy sencilla jordana y muy rica. El desayuno del día siguiente también, pero nos preparan picnic para llevar porque la ruta la empezamos antes de que abra el comedor.
Cuenta con 22 habitaciones. Nuestra habitación es muy sencilla, con una pequeña terraza con vistas a la Reserva (todas las habitaciones tienen esa terraza). Tres camas individuales y un baño con una ducha que tiene vistas a la Reserva, mientras te duchas puedes contemplar el paisaje ¡Me encanta!).
Estoy segura de que me hubiera encantado estar una noche más y haber podido hacer otra de las muchas rutas de la Reserva Natural.
Ver anochecer desde esa terraza, es todo un regalo.
Feynan Ecolodge.Feynan.
En Feynan Ecolodge me hubiera quedado más noches para hacer todas las actividades que proponen, que son muchas. Estuvimos casi el día entero de la ruta de Dana, esa noche y el día siguiente hasta después de comer y nos cundió bastante.
Feynan Ecolodge se encuentra en el corazón de Dana. Está considerado uno de los 25 mejores alojamientos ecológicos del mundo. Funciona con energía solar. 26 habitaciones, un salón de bienvenida, un patio interior con mesitas, comedor y jardín con mesas también.
La comida la llevabamos en la mochila porque nos la habían preparado también en el hotel de Dana. Tenemos tiempo para descansar, es un lugar estupendo para leer y disfrutar de no hacer nada y encontrarte contigo y con tus compañeros de viaje.
Nos apuntamos Pablo y yo a ir con uno de los beduinos del hotel a ver anochecer a unos dos km y tomarnos un té en el desierto. Momento compartido inolvidable, de esos que ya hace que merezca la pena el viaje.
Regresamos solos al hotel dando gracias por lo afortunados que somos.
Cuando el sol desaparece se encienden las velas que lo iluminan todo. Estamos solos en el hotel, somos los únicos clientes. Nos preparar la cena en la terraza – jardín exterior. Una cena exquisíta bajo la luz de las velas.
Después de cenar subimos a la azotea del edificio para ver el increíble cielo estrellado. En un primer momento con una persona del hotel que nos contaba cómo reconocer las estrellas y constelaciones, también nos cuentan cómo hacen los beduínos para orientarse en el desierto con las estrellas. Después nos quedamos los tres disfrutando, de nuevo, de ese momento. ¡Indescriptible!
Podríamos quedarnos dormidos perfectamente en los colchones de la azotea, pero bajamos a nuestra habitación, velas en los peldaños de la escalera, en los pasillos, en las ventanas, es todo como en un sueño…
Un nuevo día nos despierta en Feynan Ecolodge con un desayuno jordano estupendo en el salón porque hay muchas muchas abejas enenormes y muy peligrosas (así nos lo cuentan ellos) en el jardín.
Tenemos tiempo para disfrutar de lo que nos rodea y de escribir para poner en orden mi diario mientras esperamos a que empiece un taller de cocina personalizado solo para Pablo (seguimos siendo los únicos huéspedes), que no pudo ser más divertido.
Equipado al más estilo Masterchef comienza la «master class» de cocina beduína con el chef, cocinero principal del alojamiento. Sesión de fotos al aprendiz de cocinero y todos muchas risas.
Casi todo lo que prepararon fue nuestra comida después, había cosas riquísimas, en este viaje estamos comiendo falafel exquisito y el pan con aceitunas y aceite ¡ummm!..
Recogemos las pocas cosas que tenemos en nuestras pequeñas mochilas y nos vamos a nuestro siguiente destino, Petra.
Petra Moon Hotel 4*. Petra.
El Petra Moon Hotel está a 150 metros de la entrada al recinto arqueológico de Petra y a 100 metros del museo. La ubicación es estupenda.
Nuestra habitación es con vistas al museo. Desayuno bufé en el restaurante. Diría que lo mejor del hotel es la terraza en la que hay una piscina y un jacuzzy (de agua hirviendo).
En la otra parta de la azotea hay un restaurante, en el que cenamos una de las noches que estuvimos en Petra, con vistas a la ciudad moderna de Petra.
Además de la entrada al recinto arqueológico y al museo, el hotel está en una zona con muchos restaurantes, supermercados y tiendas. Nosotros probamos uno de ellos para una cena, compramos muchos litros de agua en uno de los pequeños supermercados y fuimos a un baño turco que nos llevó Ameen, nuestro guia.
Tengo que contar mi experiencia, que no fue del todo agradable. Es un baño que utilizan los jordanos, por eso hombres y mujeres entran en baños diferentes. Allí se marcan bastantes diferencias entre las zonas masculinas y femeninas, no digo vestuarios, todo es diferente. El de los hombres está en la planta baja y todo parece más bonito, (a los chicos les encantó). El de las chicas está en la planta de arriba, las chicas que dan los masajes están sentadas en unos sillones con poca luz, unas taquillas en unos vestuarios poco cuidados. El baño de azulejos blancos con una ventana que da a un patio interior. Es una sensación extraña, no demasiado agradable. Aunque tengo que reconocer que luego mi espalda estuvo fenomenal.
Estar en Petra es algo increíble, sin duda un sueño hecho realidad. Pero al viaje aún le quedan lugares mágicos. El siguiente también lo será, el desierto de Wadi Rum.
Hasan Zawaideh Camp.Wadi Rum.
El hotel que escogimos en el desierto Wadi Rum fue Hasan Zawaideh Camp, situado en la zona de dunas rojas. Tiene dos tipos de alojamientos: tiendas de campaña tipo beduino y las que son como una esfera que se llaman tienda marciana.
Nosotros elegimos la de tipo beduino, porque era más barata que la esfera y bueno, me quedé con las ganas de dormir en la esfera para poder ver el cielo que dicen que es increíble en Wadi Rum.
La tienda está decorada con alfombras típicas beduínas al igual que las colchas de las camas. Los enchufes estaban escondidos entre las alfombras de las paredes.
En el hotel – campamento no se ve el cielo por la noche, tienes que salir de esa zona y solo se puede ver si te adentras un poco en el desierto (o si duermes en la esfera). Solo se podía ir si cogías la excursión y en ese momento valoramos que lo que ya habíamos vivido en Feynan hacía solo unos días o en la subida al Monte Sinaí el verano anterior no iba a mejorarse… Bueno valoramos no hacerlo.
Las zonas comunes tienen la misma decoración que las tiendas, con varios comedores interiores (uno de ellos es una esfera gigante) y mesas en el exterior para disfrutar de las comidas típicas de Jordania. Por las noches se preparan te y café en un fuego y hay bailes de todo tipo (también sonó «La Macarena»).
En Wadi Rum solo hicimos una noche, está claro que hubiera sido mucho mejor hacer por lo menos dos, para hacer varias salidas en 4×4 a otros puntos del desierto, solo nos dió tiempo a realizar una. (Siempre me parece poco el tiempo del viaje).
Así llegamos al último hotel de nuestro viaje por Jordania, que será en el Mar Muerto.
Dead Sea Spa Hotel 4*. Mar Muerto.
No podíamos irnos de Jordania sin ver el Mar Muerto, y será allí nuestro último alojamiento en Dead Sea Spa Hotel 4*.
Es un complejo familiar con piscinas en el exterior, una de ellas con un gran tobogán. Una gran terraza mirador con vistas al mar. El hotel también tiene un montón de servicios como los balnearios, para hacer diferentes tratamientos. Varios restaurantes, zona para jugar al billar. Es un complejo enorme con acceso a la playa privada. Todos los hoteles tienen playa privada, la verdad es que hay pocos accesos públicos al Mar Muerto.
Las dos noches que estuvimos allí cenamos en el hotel. La comida jordana es muy buena.
Bajar al Mar Muerto implica recorrer todo el complejo para salir por unas puertas que recorren un paseo de antiguas sombrillas donde ya no hay agua. El Mar Muerto está desapareciendo. Podemos ser testigos de todo lo que se ha perdido.
Dos noches y casi tres días pasamos en este complejo hotelero, la primera tarde que llegamos, ya nos dimos un baño, raro, curioso, pero un baño en el Mar Muerto. Al día siguiente nos fuimos de excursión para ver alguno de los Castillos del Desierto más importantes. Toda la tarde la pasamos en las piscinas y en el Mar, descansando y asimilando todo lo que hemos vivido en estos días de viaje por Jordania. Aprovechamos para hacer alguna compra de jabones, sales y mascarillas de barro del Mar Muerto. El último día lo tenemos practicamente entero en el hotel; nos recogen a las 10 de la noche para llegar al aeropuerto y coger el vuelo con destino a Estambul para hacer escala y después, vuelta a casa.
En este viaje no hicimos ninguna modificación de los alojamientos elegidos por Callejeando por el mundo y sus contactos en Jordania. ¡Buenas elecciones todas!
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Las fotografías y comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Jordania. Agosto 2023.
Una estupenda escapada de cuatro días a la Costa Cantábrica del País Vasco Francés nos lleva a alojarnos en el Hotel Ibis Styles Bayonne Centre Gare. Está al lado de la estación de tren de Bayonne, de hecho dejamos en su aparcamiento el coche el primer día. Bayonne nos recibió lloviendo y casi todo el tiempo que estuvimos allí llovía.
El hotel está en la orilla del río Adur, teniendo una bonita vista de la ciudad y muy bien úbicado, en el barrio de Saint-Esprit. Tenemos el puente Saint-Esprit justo al lado que nos lleva a los dos barrios céntricos de la ciudad, Grand Bayonne y Petit Bayonne.
El hotel está en un edificio muy bonito. En el interior zona de co-working para los clientes del hotel y no clientes. El salón comedor donde se sirve el desayuno con unos grandes ventanales al río (se ve llover divinamente…). Tenemos el desayuno incluído. Además hasta las 10 de la noche puedes utilizar la sala para tomarte alguna infusión o café de forma gratuita.
Habitaciones espaciosas y cómodas, lo mejor de todo, la vista.
El barrio de Saint-Esprit es una zona tranquila, es el barrio de los murales en las paredes, pero apenas pudimos pasear por sus calles y no nos dio tiempo a ver el Museo del Chocolate (que se encuentra allí).
De Bayonne no vimos demasiadas cosas, o no las encontrábamos abiertas o diluviaba y era casi imposible llegar a ellas.
Pudimos ver la Catedral de Sainte Marie, pero no el Claustro, que tiene acceso por el exterior, pero nos lo encontramos cerrado.
Pasear por las calles diluviando hace que disfrutemos poco del paseo. Pero dejo alguna foto de bonitos rincones.
Bayonne sería nuestro epicentro para movernos por la parte de costa del País Vasco Francés. Tuvimos que cambiar alguno de los sitios que ver, pero los imprescindibles que llevabamos previstos pudimos, por lo menos, dar una vuelta.
En Bayonne cenamos en varios sitios que merecen ser nombrados. Las fotos dirán si llaman la atención o no.
Le Bistrot Itsaski
Gueuleton
Ibaïa
San Juan de Luz.
En San Juan de Luz nos dio un poco de margen la lluvia y aguantamos durante la mañana para poder pasear un poco, justo antes de comer empezó a llover y ya no paró.
Conocimos Les Halles (el mercado).
La iglesia de San Juan el Bautista, iglesia donde se casó Luis XIV con María Teresa de Austria. Muy curiosa y muy emocionante sentirse en un lugar así.
Una de las plazas más bonitas de todo el País Vasco Francés, es la plaza de Luis XIV. En ella está la famosa Casa Adam y sus famosos macarrones, que por cierto están buenísimos, (los mejores que he probado nunca). También está la casa donde durmió el Rey Luis antes de casarse y desde la que salió hacia la iglesia.
Nos dió tiempo a descubrí que San Juan de Luz tiene algún rincon precioso. Habrá que volver con buen tiempo.
Comida en Alma.
Biarritz
En Biarritz todavía hizo peor tiempo, íbamos de café en café sin poder disfrutar del paseo precioso por la playa o poder ver su bonita Virgen de la Roca, o sus famosos ríncones que no pudimos descubrir. Pero sí comprobamos lo bueno que es su mercado y su rica gastronomía.
L’Écaillerie en el Mercado de Abastos.
Bar Jean
Así es como se pasan cuatro días llenos de planes, pero que apenas puedes llevar a cabo. Eso sí comer, beber, muchas risas y muy buenas conversaciones es lo que hacen estupendo un viaje.
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Las fotografías y los comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en el País Vasco Francés.
Hoy os quiero recomendar además de visitar Aveiro, (ciudad portuguesa) por sus canales, sus museos, su gastronomía, sus playas cercanas, sus calles y rincones, por su creo que desconocido «Art Nouveau» quiero que queráis quedaros a dormir y no hacer una visita de un día sin más.
Aveiro está a una distancia de Madrid de 520Km (5 horas de viaje). De Oporto está a 76 Km (48 minutos). Es muy fácil encontrar personas que cuando están en Oporto dedican un día a visitar Aveiro, a mi personalmente me parece dos viajes muy diferentes que merece la pena hacer por separado.
Nosotros dedicamos tres días casí al completo a Aveiro y a sus playas, por eso buscamos un hotel que estuviera céntrico para ir andando a todos los sitios de la ciudad, que tuviera aparcamiento y que incluyera el desayuno.
Tuvimos la suerte de elegir el Hotel As Américas. Las instalaciones del hotel son un edificio moderno y uno de estílo Art Nouveau, precioso, donde tendríamos que ir para desayunar.
El hotel se encuentra en una calle relativamente tranquila, andando unos minutos salimos a la arteria principal de Aveiro y así al canal.
El edificio principal es el de construcción más moderna, con una decoración en su vestíbulo muy fotografiable. Con una mesa en la que podemos empezar a probar los famosos «ovos moles» (deliciosos por cierto) y un licorcito para ir entrando en calor… (hace frío en la calle, es febrero y temperatura de invierno, aunque luce el sol).
Nuestras habitaciones son estándar y cómodas, quizá un poco oscura, que da a un patio de luces donde está el aparcamiento.
La parte más bonita tanto en el exterior e interior es el edificio, la casa Art Nouveau. Para pasar del edificio principal a este se hace desde el interior.
Este fue nuestro hotel en la escapada de invierno que hacemos siempre en febrero, elegir un buen hotel con tiempo puede ser muy buena opción. Siempre hay ofertas interesantes sobre todo si incluye algún día entre semana que no sea festivo.
Así si ya si que se puede descubrir Aveiro y sus lugares, durante casí tres días completos. Llegamos un viernes a la hora de comer, que no se nos olvide que estamos en Portugal, que hay una hora menos y que son muy europeos en sus horarios… Y el último día nos levantaríamos con calma para volver a casa haciendo alguna parada en el camino.
Después de dejar las cosas en el hotel vamos a comer algo y encontramos un bar Cervecería Tico-Tico que nos hace unos platos ricos y rápidos para empezar a conocer Aveiro.
Durante el primer día descubriremos los pequeños puentes de Aveiro, dos de sus más importantes museos, callejeamos por sus calles y sus edificios Art Nouvou; probaremos los riquísimos pastelitos de nata en la plaza más famosa de la ciudad y su cervecita rica, cenaremos en un restaurante acogedor.
Durante el segundo día toca visitar la catedral – Sé de Aveiro, el Museo de Aveiro Santa Joana, la estación de tren, Forum un centro comercial al aire libre. Comeremos en una tasca marinera, conoceremos la parte alta de la ciudad.
El tercer día veremos las playas a Costa Nova, Barra, el faro de Aveiro, probaremos un rico guiso portugués; navegamos en el canal en un barco típico – moliceiro. Repetiremos sitio para cenar.
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Las fotografías y comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en Aveiro. Febreo 2023.
Tras un día maravilloso descubriendo los grandes tesoros del Museo Egipcio de El Cairo y cumpliendo un gran sueño teniendo frente a frente a las increíbles Pirámides de Giza, nos vamos a la zona del Oasis de Fayum.
Tenemos 1h y 30 minutos desde Giza, con los ojos bien abiertos para no perder detalle de lo que vemos en las carreteras egipcias.
En Egipto a todos los sitios que íbamos, pedían los papeles al guia y al conductor, muchísimo control para los turistas. Incluso a algún lugar no pudimos ni ir, como al Desierto Blanco, cuyo acceso estaba cerrado. Los desplazamientos se alargan por la cantidad de controles de policía que tenemos que pasar.
Fayum es el oasis más grande de Egipto pero no suele estar dentro de los destinos turísticos en los viajes a Egipto. Te voy a enseñar porqué sí merece estar en tus planes si viajas al país del Nilo. Zona muy importante desde la época faraónica por su importancia en la agricultura y un habitat básico para numerosas aves acuaticas. Cuenta con una población dedicada a la artesanía, un Parque Nacional que tiene una zona Patrimonio de la Humanidad y las únicas cataratas de Egipto.
Cuando vamos a entrar en la zona de Fayum nos tiene que acompañar la policía turística hasta que llegar al desierto, vamos escoltados hasta el pueblo de Tunis village Fayum, donde hacemos cambio de coche y de conductor.
Tunis hasta hace muy poco era una localidad agrícola y pesquera cercana al lago Qarun. En la década de los 80, una alfarera suiza Evelyn Porret visitó Faiyum, se quedó y construyó una casa y su taller. Poco a poco otras personas fueron construyendo allí sus casas con el mismo estilo. Los niños iban para ver lo que hacía Evelyn y les fue enseñando como hacer alfarería. Poco a poco el pueblo fue haciendose famoso por sus alojamientos rurales ecológicos y su importante artesanía.
Nos montamos en un Land Cruiser 4×4 con un beduino como conductor con unos ojos… y en chanclas para recorrer las vertiginosas dunas del desierto.
Una vez al año se hace allí un festival de artesanía. Tunis es ideal para hacer observación de aves, especialmente las «ocas de Meidum» ya conocidas en el Antiguo Egipto, además de actividades de equitación y sobre todo es el centro logístico para realizar excursiones en el desierto y sí es el Desierto del Sahara. Sus calles están llenas de murales pintados, dando si cabe más originalidad al lugar.
Wadi El Rayan National Park es un lugar increíble para no perdérselo. Área Protegida desde 1989.
Nuestra experiencia, te aseguro será inolvidable, primero por el traqueteo con vistas increíbles (mi primer desierto así que…) segundo porque nos dejaron una pequeña tabla de skate para deslizarnos por una duna en medio del desierto y completamente solos.
Después de nuestra corta bajada por la duna el traqueteo del 4×4 continua y nos adentramos en el Valle de las Ballenas (Wadi al-Hitan), Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 2005, por tener esqueletos de ballenas de 40 millones de años de antiguedad que han sido encontrados en el valle.
Ese nombre se debe a que la mayoría de los fósiles encontrados son de arqueocetos, cetáceos arcaícos que representan el eslabón de esos animales que pasaron de ser terrestres a acuáticos.
Además de muchos otros fosiles de otras épocas y de diferentes especies.
Hay un pequeño Centro de Interpretación donde se pueden ver los restos fósiles que han encontrado. La entrada al recinto (incluido el centro de interpretación) cuesta 10Dólares (nosotros llevabámos incluida la entrada en nuestro viaje) si la sacas allí directamente.
Nos encontramos en un museo al aire libre en el que podemos hacer un recorrido por un camino señalizado donde se han dejado algunos de los fósiles en el lugar donde se encontraron. El Valle tiene unos 200Km2.
Todo lo que estamos pisando fue mar hace millones de años. (Para ser más específicos era el Mar Mediterráneo),
Al lado del Centro de Interpretación sale un camino que lleva por todo el valle, con puntos marcados para ver lo que se encontró en esos puntos exactos.
Este lugar sí que es maravilloso, ya no solo por los fósiles, también por las rocas, por como están por la erosión del aire y del agua (de cuando fue mar).
Es espectacular, el calor que hace también lo es, solo hay un par de casetas con algo de sombra. ¡La una de la tarde y todo el sol de Egipto encima de nosotros! Nos quedamos a unos pocos metros del final del recorrido. Entiendo porque es muy poco visitado este lugar. Lo vemos solos… Las fotos nunca hacen justicia a los lugares increíbles, hay alguna roca con colores indifinibles… Estoy segura que será un lugar inolvidable para nosotros.
Después de beber agua para reponer líquidos cogemos de nuevo el 4×4, cada vez que el conductor sube la música… ¡Malo o bueno! ¡La velocidad aumenta y el corazón también se acelera!
Subimos y vamos por el borde de un precipicio con vistas a uno de los lagos que hay en Wady El Rayan.
De este mirador improvisado nos vamos directos al Lago Mágico, llamado así porque el agua cambia de color en función de la luz, tampoco se tiene claro de dónde sale agua, no tiene ninguna abertura por ningún sitio.
Me quedo con ganas de bañarme, pero nuestro guia nos recomienda no hacerlo. Compensando el no baño, el conductor junto con otros conductores que aparecieron allí derepente con otros turistas. Preparan a la sombra del 4×4 una alfombra, unos cojines y una mesita.
Saca la parrilla, carbón en la arena entre dos piedras y a cocinar unos trozos de pollo. También sacan del otro coche una cacerola con patatas (creo que ya están hechas) y mientras preparan una ensalada se terminan de hacer las patatas y el pollo. Lo montan todo en unas bandejitas y ¡a comer! Ya sólo nos va a faltar dormir en el desiterto.
La comida en el Lago Mágico se termina, de nuevo en el 4×4 y el volumen de la música sube… ¡Ahí madre! Una única roca en todo el desierto y vamos directos… ¡Parece que nos vamos a estampar contra ella! La rodeamos por un lado y tenemos que bajar… No hay montaña rusa mejor que este viaje…
Vamos llegando al final de esta aventura en el desierto y vamos donde se unen el superior y el inferior con unas cascaditas donde los egipcios van a bañarse. Son las únicas cascadas de Egipto, no están mal, pero me imaginaba que serían un poco más espectaculares.
Las cataratas fueron declaradas área protegida en 1989. Las cataratas se formaron en 1970 por un desbordamiento de las aguas que drenaban la tierra. Vamos que podemos decir que son artificiales ya que fueron creadas por el hombre.
Es además un área recreativa con baños, bar, mesas, puestos de artesanía donde los egipcios van a sobrellevar un poco mejor el calor los días que no trabajan. Pueden hacer actividades acuaticas en los lagos o surfear por las dunas.
Con esto termina nuestras actividades en el desierto, nos queda llegar a nuestro nuevo hotel al lado del lago Qarun, Helnan International Aubergue Fayum.
Un hotel precioso, considerado de lujo, construído en 1937. Se construyó como pabellón de caza para el rey Farouk. Muchos personajes famosos a nivel político se alojaron después de la Segunda Guerra Mundial para negociar el papel de Oriente Próximo. Hoy son egipcios con alto nivel adquisitivo los que se alojan en sus habitaciones.
Tenemos tiempo de descubrir el hotel, una habitación enorme una piscina donde nos sentimos un poco observados, sobre todo yo, la única mujer bañándose con bañador y no con todo el cuerpo tapado. La única sala del hotel con wifi gratis es la sala Churchil. El hotel está casi en una de las orillas del lago Qarun, es casi más salino que el mar, no suelen recomendar el baño en sus aguas, pero los egipcios se bañan.
Disfrutamos de una rica cena y un excelente desayuno y otro baño en la piscina antes de volver a El Cairo para estar lo que queda del día, cambiar de hotel, sorprendernos en el Bazar Al Halili y prepararnos para nuestro viaje a Luxor y al explendor del Alto Egipcio.
SI HAS LLEGADO HASTA AQUÍ ¡GRACIAS POR LEERME HASTA EL FINAL! SI TE HA GUSTADO 👍🏼✍🏼
Las fotografías y los comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en el Oasis de Fayoum.Egipto, agosto 2022
Hace poco hicimos una escapada a la ciudad de Alicante (iré contando próximamente) en nuestro afán por descubrir las capitales españolas. Alicante es más que un destino de playa, la ciudad también merece una visita por su arquitectura, sus paseos, su oferta cultural y gastronómica.
Empiezo por recomendarte un hotel entre el mar y la montaña. Muy cerca del MARQ (Museo Arqueológico Provincicial de Alicante), a 10 minutos andando del centro de la ciudad, del Puerto de Alicante y a 5 minutos de la playa del Postiguet. A los pies del Castillo de Santa Bárbara, al que se puede subir andando por una senda si te gusta caminar y hacer algo de ejercicio, pero tranquilo, también está muy cerca el acceso al castillo en el ascensor más famoso de la ciudad.
Edificio original por sus dibujos mayas en la fachada. 11 plantas y servicios ideados para conseguir una estancia agradable en la ciudad. Dejo su web aquí para ver las habitaciones y servicios concretos. (Nos quedó probar su piscina, habrá que volver).
Teníamos una habitación con terracita y vistas a la senda que sube al Castillo de Santa Bárbara. Habitación standar para dos personas, sin lujos pero cómoda y funcional.
En esta ocasión reservamos habitación y desayuno incluído, pero no parking, ya que habíamos visto que al lado se podía aparcar sin problemas y sin coste alguno.
Un nuevo destino una nueva ciudad en una nueva escapada llena de grandes descubrimientos y un gran guia que en la distancia nos transmitió sus recomendaciones, pero sobre todo el amor por su ciudad. Gracias Rafa, ya hablaré de todas tus sugerencias.
Si has llegado hasta aquí ¡GRACIAS por leerme hasta el final! Si te ha gustado 👍🏼✍🏼
Las fotografías y comentarios son de Imagina Y Vive Tu Viaje en el Hotel Maya de Alicante. Febrero 2022.
Imagina y vive tu viaje 